Tras las elecciones en Estados Unidos, los comentarios sexista, racistas y ofensivos han aumentado en redes sociales y espacios públicos. No es como que antes no existieran, sino que ahora estos comentarios están saliendo a la luz de una manera más fluida y sin pena. Así es como la frase “Your body my choice” ha estado tomando mucha fuerza, causando que en los últimos días, Estados Unidos esté lleno de un clima super hostil. Además, la preocupación por la protección de los derechos de las mujeres y minorías estadounidenses ha aumentado.
Homofobia y sexismo
En el campus de Texas State University, dos hombres fueron vistos con carteles misóginos y homofóbicos. Los cuales decían cosas tipo: “Tipos de propiedad: Mujeres, esclavos, animales…” y “El sexo homosexual es un pecado”. Este acto rápidamente generó un sin fin de críticas para estos “hombres” anónimos. El presidente de esta universidad, salió a defender a sus estudiantes. Y argumentó que aunque la libertad de expresión es un valor fundamental, el odio no tiene cabida en sus instalaciones.
Este incidente resalta una tendencia alarmante de mensajes de odio que han cobrado fuerza en redes sociales y que algunos extremistas parecen utilizar para expresar sus opiniones contra los derechos reproductivos de las mujeres y la libertad de la sexualidad de las personas.
Your body, my choice
En Twitter y TikTok, la frase “your body, my choice” está muy en tendencia. Esta frase está distorsionada de la frase y consigna feminista “my body, my choice”, la cual defiende y apoya los derechos reproductivos. Y ahora los grupos extremistas y misóginos la están usando para esparcir sus ideas opresoras. Tras la reelección de Trump, se registró un incremento del 4,600% en las menciones de esta frase, y videos con esta consigna se volvieron virales, algunos incluso acompañados de amenazas de violencia.
En el ambiente escolar, esta tendencia preocupante también ha tenido repercusiones: en el distrito escolar de Stevens Point en Wisconsin, se informó a los padres que estudiantes masculinos estaban usando la frase para intimidar a sus compañeras. Obviamente, las redes sociales están tomando medidas para controlar esta oleada de contenido, con TikTok comprometiéndose a eliminar los videos que promuevan este tipo de mensajes. Sin embargo, esta retórica no se limita al ámbito virtual, pues como estamos viendo, estos videos solo son las causas. Y en la realidad, estas situaciones de acoso y violencia ya están pasando. Nuevamente volvemos a lo mismo, estos discursos de odio solo parecen seguir normalizándose entre los estadounidenses radicales.
Nuestra vida, nuestra libertad
Lamentablemente estos eventos no sorprenden a nadie. Solo debemos de voltear y ver a nuestro alrededor para darnos cuenta que la opresión hacia las mujeres, la comunidad LGBTQ+ y las minorías en general sigue siendo una realidad que al parecer va tomando cada vez más fuerza. Creemos que vivimos en una sociedad donde las nuevas generaciones son tolerantes y que vamos rompiendo patrones viejos e inservibles. Pero no. La violencia e ideología radical y racista es algo tan profundo y viejo que ni siquiera los genes que trae la Gen Z la han podido eliminar.
Las personas que creen que las mujeres son una propiedad y que los homosexuales se irán al infierno son los mismo que tienen miedo de perder el privilegio y posición de poder que les han dado sus antecesores, que estuvieron en la misma situación.
Este tipo de personas ven la igualdad y el respeto como amenazas a su identidad y estatus. Prefieren aferrarse a una visión autoritaria del mundo, donde cualquier cambio en favor de la diversidad o inclusión representa una pérdida de control. Así, su miedo mas grande es estar en un mundo donde su poder ya no sea una norma incuestionable, sino una entre muchas voces en un sistema que valora a todos por igual.
