Imagina esto: tienes antojo de algo dulce, pero ya te cansaste de los mismos dulces. Que si el chocolate Carlos V, que si las gomitas enchiladas, que si los gansitos… ¡basta ya! Hay muchos más dulces que pueden saciar tu antojo, no es necesario repetir los mismos que encuentras en el Oxxo. El aburrimiento de los mismos sabores es una oportunidad para aventurarte dentro de la cocina asiática al probar cualquiera de estos dulces japoneses. Quizá algunos ya los conozcas, pero no sepas otros sabores o variaciones que existen de ese mismo producto. Esta breve lista será una pequeña guía en el territorio (medio) desconocido de los dulces japoneses que ya han llegado a Puebla.
Pocky
El pocky es un clásico: el dulce japonés por excelencia, con variaciones coreanas como el Pepero. Lo que más distingue a los pockys es su gran variedad de sabores. No solo existe chocolate o fresa, también sabores como cookies and cream, matcha, plátano con chocolate, moras, chocolate con almendras… Te aseguro que hay millones de sabores que nunca se nos hubieran ocurrido.
Daifuku
Este dulce consiste en una cobertura de arroz glutinoso con relleno de helado, crema o anko, una pasta hecha de frijoles dulces. ¿Cómo que eso no es un mochi? De hecho, no. El mochi es una masa de arroz glutinoso que puede ser dulce o salado y tiene connotaciones religiosas. Así que la próxima vez que veas un mochi relleno de helado, no te dejes engañar: es un daifuku.
Gomitas frutales
Pues si las gomitas también existen en México, ¿qué es lo novedoso de esto? Bueno, que los dulces japoneses van un paso más allá y las frutas saben completamente diferente. ¿Qué tal gomitas de uva? ¿Uva verde o morada? ¿Has probado gomitas de mango que no sean enchiladas? ¿Y una de durazno que sepa a durazno rosa? Si esos todavía no te convencen, existen sabores como lichi, cereza, kiwi, limón con coca cola, sandía y muchas más variaciones. Además, si las gomitas no son tus favoritas, también existen versiones de estos sabores frutales en forma de pequeñas gelatinas.
Taiyaki y Doriyaki
En esta lista no podía faltar algo más consistente, algo más de pancito. En esa categoría entran el taiyaki y el doriyaki. El taiyaki es inconfundible con su forma de pez, normalmente se encuentra relleno de chocolate, pero puede estar relleno de frijol dulce, crema o hasta queso. En cambio, el doriyaki parece más bien un hot cake, aunque su masa es más densa y está relleno de frijol dulce, chocolate o matcha.
Tiendas en Puebla
Si cualquiera de estos productos se te antojó y piensas que nunca podrías conseguirlos, no entres en pánico. En Puebla existen dos lugares que se dedican a vender dulces japoneses, coreanos o asiáticos en general.
El primero, mucho más japonés, es Obāchan, ubicado en Calle 45 Poniente, 1937-local 27. Se encuentra junto a plaza La Noria, no hay pierde. Esta tienda vende una gran variedad de productos como arroz, especias, salsas, fideos para complementar tu cocina y así puedas cocinar platillos asiáticos.
La otra tienda es Amart, ubicada en Avenida Juárez 2930, La Paz. Este lugar se dedica más a la venta de productos coreanos, pero también puedes encontrar cosas japonesas. Además, esta tienda vende productos de maquillaje o skincare, de kpop y cuenta con un restaurante de comida coreana llamado The Ramen House. Es casi un dos por uno, vas a comprar dulces japoneses y de paso comes un rico ramen.
Y lo mejor de todo es que ¡ya abrieron otra sucursal! Ubicada en la Isla, atrás del centro comercial Angelópolis, en la Calle Osa Mayor. En la plaza donde se encuentra Gandhi, Amart está junto a Wild dog. Encontrarás la misma variedad de snacks asiáticos, kpop, maquillaje y skincare coreano. Y claro que todavía puedes comer en The Ramen House cualquiera de sus platillos asiáticos como si fuera hecho en casa. ¡Todo es una completa delicia!
Ahora no solo sabes un poco más sobre estos dulces japoneses, también sabes dónde poder comprarlos en Puebla. Como botanas, para picar mientras ves una película o como postrecito después de la comida, estos dulces son fantásticos para cualquier ocasión. ¿Te atreves a probar los pockys de plátano con chocolate o cualquier variación loca? ¿Mirarás con desprecio a los mochis impostores de los daifukus? ¿Irás a Amart a comprar dulces y terminarás comiendo un ramen? Ojalá que la respuesta a todo lo anterior sea sí.
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