El maltrato animal no es una práctica ajena en México, ya que desde hace un largo tiempo nuestro país y en general el ambiente humano se ha mostrado hostil con estas criaturas. Tratándolas de las formas más perversas que se puedan imaginar. Tal es el caso de Margot, un lomito que fue encomendado al Hotel para Perros Boutique Dogtime en vista de que sus dueños iban a ausentarse por un periodo de tiempo. No obstante, en lugar de recibir un cuidado digno, Margot fue maltratada por uno de los empleados del lugar, al grado de casi ser asesinada.
Una usuaria de internet logró capturar el momento exacto en el que Margot estaba siendo golpeada y asfixiada por el empleador de Dogtime. El video fue viralizado en redes sociales hasta llegar a manos de la Brigada de Vigilancia Animal (BVA). Por lo que, las autoridades no tardaron en atender el llamado y rescatar a Margot.
Afortunadamente, el operativo fue exitoso y Margot pasó a ser atendida por un centro veterinario de la Alcaldía de la Magdalena Contreras. Asimismo, el dueño del lugar afirmó que tal persona fue despedida y en el comunicado oficial de Dogtime se determinó a aclarar que dichas acciones violentas no representan los principios de la empresa. No obstante, la indignación del público no se ha dejado apaciguar por dichas disculpas y, por tanto, se ha demandado que el lugar sea clausurado.
Detrás de lo más evidente hasta lo más sutil del maltrato animal
Sin duda, cuando escuchamos este tipo de noticias es imposible no sentir empatía por aquellas criaturas. Pero, aún queda un largo camino por recorrer para que este tipo de violencias hacia los animales finalmente cese. Después de todo, no es el único caso que tenemos en 2023 sobre maltrato animal y, mucho menos, en la historia. Tanto así que el número de especies extintas cada vez va incrementando.
Precisamente es importante, en primer lugar, percatarse que la noción de “maltrato animal” va mucho más allá de este tipo de noticias que hace evidente la agresión, ya que existen otro tipo de violencias mucho más sutiles de las que también debemos ser conscientes para promover un digno cuidado y coexistencia con los animales. Después de todo, las peleas callejeras organizadas, la caza y el abandono de mascotas no es la única forma en la que se puede presentar el maltrato animal, sino también mediante la explotación laboral, de entretenimiento y de consumo de la que somos parte al estar inmersos en una sociedad de consumo tan masiva.
Ambiente humano hostil para los animales
Esto significa que gran parte del ambiente humano está volviéndose una verdadera amenaza no solo contra el ambiente natural, sino también animal. Lo cual se debe a que el comportamiento hostil del ser humano proviene de una visión antropocentrista. En donde los demás seres vivos quedan en segundo plano y, por tanto, están al servicio humano. Por tanto, es necesario cuestionarnos el tipo de relación que establecemos con otras entidades no propiamente humanas.
De esta forma, en la ética no solo compete al cuidado de la integridad humana, sino que se extendería a todo ser vivo con el que coexistimos en este planeta. Siendo así que, los animales, tal como vimos con el caso de Margot, también tienen derechos que deben ser respetados y validados. Juzgar nuestra moral con base en cómo nos tratamos los unos a los otros y a los demás aunque no seamos de la misma especie.