Cuando pensamos en una ofrenda de Día de muertos, inmediatamente pensamos en papel picado de colores, fotografías de nuestros difuntos queridos, adornitos de las cosas que les gustaban, velas, flor de cempasúchil, mucha fruta y comida. Pero ¿qué pasaría si le quitas los colores, la comida, las fotos y bueno todo lo que debería tener una ofrenda tradicional de Día de muertos? ¿seguiría siendo una ofrenda o solo un adorno mal logrado? Bueno, aunque no lo creas, este cambio en lo que debería llevar o no una ofrenda se hizo realidad con Yuya, quien este año realizo una ofrenda bastante particular con el propósito de ser astethic. Esto causo una fuerte polémica de si lo que hizo Yuya es un insulto a la tradición cultural o, en cambio, si acaso es una propuesta alternativa para expresar nuestras tradiciones de otra manera.
Una ofrenda asthetic
Bien, como tal, no hay una definición de tal cosa porque simplemente no había existido o, más bien, a nadie se le paso por la cabeza hacer asthetic a algo que de por sí ya es bastante estético y bello tal como se conoce. Sin embargo, en contra de todo pronóstico tradicional de lo que debería ser una auténtica ofrenda mexicana de Día de muertos, este nuevo proyecto asthetic es lo que quiso adaptar la youtuber Yuya con su propia ofrenda. Dando como resultado, lo siguiente:
Como podemos ver en el video que compartió en redes sociales, Yuya al querer hacer asthetic la ofrenda quita muchos de los elementos esenciales de una ofrenda tradicional del Día de muertos y, en todo caso, aquellos que conserva sustituye por algo plastificado y moderno. Esto llevó a percibir su ofrenda como muy desabrida y estéril, o como una propuesta alternativa y creativa. Por obvias razones, sus más fieles seguidores la apoyaron en los comentarios de vídeo, pero el resto de esa burbuja se la ha pasado criticando severamente a la Youtuber en Twitter.
¿Si le agregas lo asthetic le quitas la esencia tradicional?
En efecto, con todo esto ha surgido la pregunta de si lo asthetic y lo tradicional están peleados el uno con el otro o si acaso en casos muy muy particulares se puede considerar reconciliarse. Ahora, si consideramos que el chiste de Día de muertos es adaptar una estética maximalista y colorida; mientras que, por el contrario, la moda asthetic busca lo minimalista y lo neutral, entonces en este caso podemos decir que no parecen muy compatibles ambos estilos.
Claro, algunos estarán a favor de proponer nuevos estilos y modas que se adapten a los nuevos tiempos y eras, pero otros, ante esto, se preguntarán ¿para qué adoptar una tradición o rito si le quitas todo lo que lo hace tradicional? Si bien, las tradiciones están basadas en formulas de cómo deberían llevarse a cabo las cosas para respetar la creencia cultural, también hay que recordar que esas formulas pueden irse adaptando a las necesidades que van surgiendo. Después de todo, no hacemos las mismas ofrendas que hacían nuestros antepasados. Es más ni siquiera Día de muertos es tal cual se originó en la época prehispánica, pues con el tiempo ha ido evolucionando hasta llegar a ser la festividad que es ahora. Pero, en este caso, ¿realmente lo que hizo Yuya fue una propuesta contracultural o simplemente un experimento que no salió como lo esperaba?
¿Tradición o moda?
Claro, las tradiciones pueden cambiar, pero así nada más porque así. Es decir, lo que llevó a que Día de muertos fuera cambiando históricamente se debe muchos acontecimientos sociales, como influencias religiosas y la mezcla racial. Pero en este caso no queda muy claro cómo podrías justificar hacer una ofrenda astethic que no sea más que por sensacionalismo y llamar la atención. Por eso y más no sorprende el severo juicio al que se metió la ofrenda asthetic de Yuya contra toda una cultura mexicana.
Lo que hizo que Día de muertos se convirtiera en todo un fenómeno mítico y legendario, incluso ante los ojos del mundo, fue toda su riqueza cultural e histórica expresada en un mundo de colores, magia y elementos simbólicos. Pero si quitas todo eso para volverlo una moda o tendencia banal, entonces cabría preguntarnos si realmente estás entendiendo el punto de esta celebración y su razón de que sea una de nuestras mayores tradiciones.